Soulbound: Aids of Sigmar (parte 1)

Si eres de esos jugadores que aún llora en silencio el Fin de los Tiempos. Que escupe cada vez que alguien dice «Stormcast». Un negacionista de Age of Sigmar, que reniega de cualquier título que empiece con «Warhammer» y no termine con «Fantasy». Si eres una de esas personas que no soporta la última propuesta de fantasía épica de Games Workshop porque cree que es demasiado barroca, y que odia el nuevo mundo de Warhammer «porque no tiene lore». Si juraste venganza y odio eterno hacia todo lo que oliese a británico, pero te lanzaste a los pies de su bandera en cuanto viste el logo de «Old World»… ¡Corre insensato! ¡Si sigues leyendo querrás arrancarte los ojos!

¿Cómo? ¿Que no sabes de qué estoy hablando? Vale, pues… supongo que a estas alturas de la película, raro será encontrar a alguien que no sepa qué es Warhammer. Ahora mismo, este nombre es más famoso de lo que lo ha sido nunca y, a diferencia de Hasbro, a Games Workshop esto de monetizarlo hasta la estupidez sí que le está saliendo bien (los warhammeros tenemos una paciencia y un lomo enormes y duros, que ya lo quisieran nuestros bolsillos).

Si no has jugado al juego de miniaturas, posiblemente hayas jugado al juego de rol, Warhammer Fantasy RPG, que ahora va por su cuarta edición, o a alguna de sus otras variantes de Warhammer 40K. Y si no, como mínimo, te habrás comprado alguna mini en algún momento y hasta puede que la hayas pintado. Y si no… pues mira, anótalo en la lista de cosas que hacer antes de morir.

Miniatura de un Stormcast.

El tema es que, en su día, los creadores del juego de miniaturas Warhammer Fantasy Battles se cansaron (supuestamente) de perder dinero y decidieron finiquitar el juego. Tras tropecientos años habiendo arrastrado a legiones de seguidores en todo el mundo hacia su vicio, con aquellas ocho ediciones del reglamento y no sé cuántas reediciones de sus minis, se sacaron de la manga una colección de libros especial llamada El Fin de los Tiempos, mediante la cual justificaban que su mundo de fantasía se iba a la mierda, ganaban los malos (literalmente) y los de la empresa cerraban ese chiringuito (en la vida real). Imaginaos la cara de la gente… pues eso. A los pocos años anunciaron un nuevo wargame que, para más inri, pasaba cientos de años después de que el antiguo mundo de Warhammer saltara (literalmente, insisto) por los aires. Sacaron nuevas facciones, una historia que era muy regular, siendo generosos, y un manual de reglas… ah, no, es verdad, que ni siquiera tenían reglas (jo jo jo). Era como comprarte unos Playmobil y montarte tú la película con tus amigos (muy adecuado para los treintañeros barbudos de la época, si duda), solo que tenías que montarlos y pintarlos tú. Por suerte, o por equivocación, que con estos ingleses nunca se sabe, rectificaron y comenzaron a sacar manuales que, por lo que parecía, se tomaban cada vez más en serio. Algunos jugadores reconocieron las virtudes del nuevo juego y otros no (el odio lleva al lado oscuro, ya sabemos cómo va eso). A día de hoy es más buen juego de lo que fue jamás Fantasy Battles y vende bastante bien. Eso sí, las despreciables políticas neoliberales de Games Workshop están en modo cuesta abajo y sin frenos.

Peeeero, joder. Volvamos al tema que nos ocupa. El juego de rol. Al igual que Fantasy tuvo la suya, pues Age of Sigmar también tiene representación rolera. Y por suerte para todos, y al igual también que su versión Fantasy, es un juegazo. Bajo el nombre Age of Sigmar: Soulbound, sitúa la acción en un universo llamado Reinos Mortales, en el que hay un total de 8 mundos (llamados Reinos) del tamaño de un planeta, conectados todos entre sí por diversos portales mágicos y una red umbría extraña para la que aún no han sacado reglas. Soulbound es una fantasía mucho más épica y desatada (no por ello menos oscura) que su predecesor Fantasy. Para los que os interese conocer más detalles, os animo a que veáis alguna videoreseña. Hay muy pocas en el idioma de Aramís Fuster, así que no os debería ser muy difícil encontrarlas (tengo mis preferencias, pero de momento no me atrevo a mostrar mis filias, no sea que me denuncien).

Por lo que respecta a las ayudas que tradujo un servidor en su día, se trata de la hoja de personaje, la de grupo y de una hoja de referencia con lo básico e importante para gestionar la partida (reglas diversas, dificultades, palabras clave… lo que suele estar en una pantalla, vamos, y algunas chucherías más).

Por mi parte, tuve la oportunidad de jugar dos o tres sesiones a este juego, con el maestro Pau, administrador de la Sigmaroteca (la wiki en castellano de Age of Sigmar). Es un pozo de sabiduría absurdamente grande y profundo sobre la historia y la ambientación en general de los Reinos Mortales. Pero en la próxima entrada daré algunos detalles más, puesto que tengo más cosillas traducidas. También quiero hablar de los criterios de traducción, porque seguro que a más de uno le explota la cabeza al leer Fuegoalma.

Vamos por faena

Pos eso, que nos andamos por las ramas. Por el momento, aquí tenéis las ayuditas más básicas que creo que hay que tener a mano. También traduje los talentos del libro básico, que los usamos para crear las fichas de las aventuras en su día, pero quiero revisarlos y añadir algunos detalles.

Sobre la hoja de personaje, poco hay que decir. Es la hoja oficial a color que viene también con el libro básico del juego y que está disponible para su descarga gratuita en el sitio web de Cubicle7. La usaremos para controlar las estadísticas y el estado de nuestro personaje. En cuanto a la hoja de grupo, descargable en el mismo sitio, será común para todos los jugadores y la usarán para llevar la cuenta de las cosas que atañen al grupo (los puntos de fuegoalma, aliados, enemigos, metas y objetivos comunes, y cosas similares). Las hojas de referencia, por su parte, son creación original de un usuario de Twitter llamado @rolling_bad, con el que no he logrado contactar (básicamente, le escribí y no responde). Esta última me parece muy útil e interesante, así que la veo obligatoria si nunca llego a dirigir.

Y lo sé, lo sé. A aquellos que no conozcan el juego, no he explicado nada sobre el juego en si, o sobre su sistema. Pero insisto en que en llutuve encontraréis pocas pero muy buenas reseñas.

Nada más por hoy. Espero que os sea útil.

Hoja de Personaje

Hoja de Grupo

Hojas de Referencia

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